
Mece la melodía delicadas hojas ocres
como el delicado ingenio que se desvanece
o el delicado suspiro de un lamento
o como los pétalos huérfanos de la flor
Las ideas aguardan en la cima
y tu observas el declive de la palabra
y sientes la espera pausada
y guardas silencio, silencio…
El eterno tiempo, el sublime, el constante
el compañero a quien se culpa sin ser culpable
se aflige por la delicada estrofa que intuye.
El tiempo se estremece en los días de receso.
sedemiuqse